Sant Cugat es una ciudad viva que, sin perder su historia y tradición, destaca por su calidad de vida. Convertida en un referente de la innovación y la sostenibilidad y con una creciente comunidad internacional que la impulsa e inspira, Sant Cugat ofrece grandes espacios verdes, formados por parques urbanos y el entorno natural privilegiado de la Sierra de Collserola.